Empezamos con el orinal de Duchamp, el dadaísmo, de ahí la idea liberadora de que es arte es cualquier cosa. Especie de anarquía del arte.
Platón. Y por supuesto Los Diálogos, que de cierta manera representa el ideal socrático de la conversación filosófica. Se habló de areté y de eudaimonia. Luego comenzó una discusión interesante en la clase... qué importancia tienen los deseos en nuestras acciones.
________
Harry Frankfurt habla de deseos de primer orden, dirigidos hacia el mundo, y deseos de segundo orden, dirigidos hacia los deseos de primer orden. Para Frankfurt, la volición consiste en nuestra capacidad de actuar sobre deseos de segundo orden con los que nos sentimos capaces de actuar. Algo así:
deseo 2do orden --------------> volición
Podemos analizar la adicción en la siguiente matriz:
adicto automático deseos 1er orden no hay deseos de 2do orden no hay volición
adicto feliz deseos 1er orden deseos de 2do orden volición
adicto incapaz deseos 1er orden deseo de 2do orden en contra del anterior
incapaz de producir volición
Es decir, ante el dilema de entrar o irse del umbral del apartamento de su mejor amigo con la mujer de este invitándolo a un café, existe la posibilidad de que Tomás termine entrando al apartamento aunque realmente no quiere, aunque lucha internamente por no entrar. Dado lo anterior, Frankfurt hace la siguiente pregunta: ¿podemos decir que Tomás ha actuado libremente?
_________
A propósito... ¿cómo va lo de la copia del libro?